sábado, 18 de octubre de 2008

Sevilla alumbra el primer bebé seleccionado genéticamente



Las células madre de su cordón umbilical servirán para tratar la anémia crónica hereditaria de su hermano de 6 años.


El Hospital Virgen del Rocio de Sevilla vio nacer al primer niño seleccionado genéticamente en un proceso que por primera vez se produjo de manera íntegra en España. El niño, que se llama Javier y que pesó alrededor de tres kilos y catrocientos gramos, nació con la "esperanza" de que su hermano, aquejado de una grave enfermedad hereditaria, Beta Talasemia mayor (la anemia más agresiva), pueda "tener una oportunidad para seguir con vida", según rezaba la nota de prensa del Servicio Andaluz de Salud (SAS).

En esa misma nota, el SAS, informó sobre el proceso que se va a llevar a cabo para tratar la enfermedad de Andrés y confirmó que la sangre del cordón umbilical del neonato servirá para realizarle un transplante de medula, con el objetivo que empiece a generar células sin el transtorno que lo aqueja.

Los padres, Soledad Puertas y Andrés Mariscal, se encuentran felices, tranquilos y sobre todo agradecidos para con los 31 médicos y 14 investigadores que han llevado a buen término el proceso. Para ellos ha sido un proceso extraño, debido a que se encontraban perdidos en este tema -sólo conocían algunas investigaciones sobre células madre, pero a la vez ilusionante ya que empezaron a hablar con los facultativos y en cuanto tuvieron los permisos, vieron "una oportunidad de cura" para su hijo.

FOTO: Soledad y Andrés con el recién nacido en brazos. /EFE

Por su parte, Javier, que en palabras de su madre "es consciente de que el nacimiento de su hermano puede ayudarle a superar la enfermedad", se encuentra a la espera de que se pueda realizar la intervención. Hasta entonces la sangre quedará almacenada en el Banco de Cordón Umbilical de Málaga. No obstante, los médicos son muy optimistas en relación a este proceso y estiman que la tasa de curación se encuentra alrededor del 90%.

Un largo proceso

Una vez que los padres consiguieron los permisos para dar inicio al proceso, los médicos optaron por la técnica del Diagnóstico Genético Preimplantacional mediante el cual se comprueba si un embrión está geneticamente sano antes de ser implantado en el útero. Para ello, el embrión se fecunda in vitro y se analiza su material genético para comprobar que no es portador de ninguna enfermedad.

Éste es precisamente el procedimiento que se ha seguido en el Hospital Virgen del Rocio de Sevilla y con él se ha conseguido no sólo "la concepción y alumbramiento de un bebé libre de la enfermedad hereditaria", sino también un perfecto donante ya que ambos tienen un perfil de histocompatibilidad (HLA) indéntico, algo que permite que las posibilidades de rechazo se vean reducidas drásticamente y se sitúen entre un 10 y un 30 %.

Ahora, una vez producido el alumbramiento, comienza una fase delicada, puesto que Javier, tendrá que ser sometido a un proceso de quimioteparia, de menor intensidad que la realizada para tratar el cáncer, para evitar el rechazo en el grado más alto posible. Si todo va bien, el proceso podría ser completado en unos 20 días.

Punto negro

La Conferencia Episcopal publicó un comunicado en el que rechaza de pleno todo el proceso realizado para el nacimiento del primer bebé libre de una enfermedad hereditaria, pues considera que en el tratamiento no se han tenido en cuenta "las implicaciones morales" ni "la eliminación de los embriones enfermos".

Del mismo modo considera que "los hermanos a los que se les ha privado del derecho a nacer han sido desechados por no ser útiles" y vuelve a incidir en la condena hacia la normativa, aprobada en 2006, por la cual es legal que este tipo de procesos se lleven cabo.

Por cierto, una normativa que el Partido Popular no aprobó en su día, bajo el argumento de "la defensa del embrión humano" y sobre la que a día de hoy guarda silencio.



No hay comentarios: